viernes, 27 de mayo de 2011

Siniestra reina de barro IV

Maldito monstruo de gusanos, ya no me devoraras, quizá ya no tenga carne, quizá mi sangre sea solo venenos, quizá ya no respire aire, pero la esperanza jamás me abandonará, yo no soy como tú, a ti te han quebrado los talones, y no sabes como volver a pararte, yo por mi parte renaceré, seré un nuevo ser en el futuro y me alimentare de la sabiduría de la vida, tu dejaras este mundo hoy para nunca volver, tu desgracia no me devorara porque soy mucho más fuerte, ojala entiendas hoy y cierres tus ojos de una vez, acabes tu destrucción.

Mañana caerá la lluvia, y nos limpiara, la tierra sedienta volverá a la vida, y tu ya no existirás.

Tú reina cobarde, inútil, incapaz, perversa y alienable, ya no me provocas nada, ya no existes, ya no eres nada.

YA NUNCA LLORARÉ POR TI.

sábado, 14 de mayo de 2011

Siniestra reina de barro III

Desgraciado deforme, tu piel ya no es de nuestro color, tu cabello ha caído, ni te puedes reconocer, ya no sabes quien eres, tu memoria se ha perdido, pero eternamente te torturas con el dolor eterno que sentirás por siempre.

Ese dolor que intentaste hacernos sentir, ese miedo que quisiste imponernos, ese muro en que quisiste encerrarnos.

Hemos fingido escuchar, ahora soy libre mi vieja reina, como el viejo león destronado, ya no eres nada, inmerecido ser, cobarde pretexto de persona.

¿Adónde fue tu humanidad?

Me rio de ti, de tu sufrir

¿Dónde quedó tu amor y tu gloria?

Destronada y sola, condenada está tú vida, porque no supiste nunca como volar, no pudiste abrir la boca a tiempo, y hoy perdiste la esperanza, haz perdido las ganas de existir, pero te niegas a morir.

Tú patético cobarde, no puedes ni morir, que mi espada te atraviese y se muera tu desgraciada, patética existencia; ya no gobiernas mi mundo, ojalá la vida te consuma, que el castigo divino te devore, ser ignorante y perecedero, las moscas te han rodeado.

Por Dios, mi reina, cierra ya los ojos, descose tus orejas, ya puedes sentir todo mi dolor.

¿Haz aprendido la lección? Estoy segura de que no.

Jamás te arrepentiste de mi dolor, solo escuchas tus palabras, y solo hablas incoherencias; ser siniestro, aun me dominas, la noche de mi libertad está cerca, y entonces endemoniada bruja, desaparecerás, que tu eterno miedo te devore, mirare a los gusanos comerte, y me jactare de tu muerte, recordaremos nuestros nombres, y volveremos a tener nuestros rostros.

Pero tú, ya no tendrás nada, serás solo tú quien podrá terminar tu eterno dolor, pero mi espada tal vez, algún día te encuentre y te cercene, te destruiré horrible demonio, ya no me lastimaras, ya no soportare tu odiosa ira, ni tus lagrimas me llegaran, ya jamás romperás mi vida.

Tu señor de las tinieblas te ha abandonado, perverso y cobarde ser, él jamás cumpliría tus deseos, solo te dejo soñar, y de tu dolor y odio se alimentó.

Sola en tu cuarto, la sangre te hervirá, beberás mi contaminado y muerto aire, y mi fantasma te hará llorar, mi dolor será todo tuyo, y ya nada en ti será humano.